El empresario de la carne criticó que el Gobierno le pague a exportadores de soja “el 50% de lo que vale el dólar” y que “cuando van a cobrar les cobre el 33% de impuesto”
El empresario de la carne Alberto Samid aseguró este viernes que el gobierno nacional debe bajar las retenciones a la producción agropecuaria y poner el énfasis en evitar el contrabando de granos. En una entrevista con C5N, Samid aseguró que los peronistas no deben tener un “temor reverencial” hacia el gobierno y dijo que tienen la obligación de “decir lo que está pasando”.
En ese sentido, consideró que hay que bajar las retenciones a la soja y sincerar el tipo de cambio. “El Gobierno les paga (a los productores) el 50% de lo que vale el dólar y cuando van a cobrar les saca el 33%”, señaló, y aseguró que “es demasiado lo que le menten la mano en el bolsillo”.
Según Samid, en primer lugar el Gobierno debería “sacar las retenciones y pagar lo que vale el dólar” para desalentar lo que calificó como el principal problema: el contrabando de granos. “Los más delincuentes, contrabandean. Después están los que dicen que llevan 10 pero en realidad llevan 20. Y después están las liquidaciones, que están todas dibujadas”, explicó Samid.
Samid denunció que “en este mismo momento se está yendo el trigo para Bolivia” porque recién terminó la cosecha y desde ese país sale en contrabando al resto del mundo. “Después cuando preguntan dónde está el trigo te dicen que les rompieron el silobolsa”, dijo.
“Gendarmería es la fuerza más corrupta, hoy cobra $50 mil por cada camión que se va. Hay fronteras en las que se pelean para ver quién cobra menos.Y dentro de poco la soja sale para Paraguay y Brasil. Nosotros sembramos y Paraguay la vende”, denunció.
En cuanto a la polémica por la carne de baja calidad vendida bajo los precios promocionales implementados por el oficialismo, Samid aseguró que se trató de una jugada que le “salió mal” a Mario Ravettino, gerente del consorcio de frigoríficos ABC.
Este miércoles entró en vigencia el programa que dispuso el Gobierno de oferta de ocho cortes de carne a “precios populares” en supermercados de todo el país. Sin embargo, tras la primera jornada unas imágenes que se viralizaron en las redes sociales causaron indignación sobre el estado de la comida.