En ese sentido, indicó que no los convocaron al encuentro que mantuvo el Intendente, el último martes, con referentes de distintos rubros de la economía. “No nos participan en nada. Nosotros todo el tiempo mandamos a los contactos que tenemos, preguntamos todos los días”, dijo Lorena Capel.
Por otro lado, señaló que “el viernes nos atendían de la Usina para ver si pueden hacer algo con las facturas que seguimos acumulando sin estar yendo al salón, porque se nos siguieron generando cargos de la Usina, de gas y todos los gastos fijos, a pesar de que no estamos yendo a los salones”.
La emprendedora planteó que “si no nos van a dar ningún tipo de ayuda, que nos dejen trabajar” y reiteró que “nos dicen que sigamos teniendo paciencia, pero vamos para medio año sin trabajar, sin generar un ingreso. Ya no lo podemos sostener y estamos ahí, con el ‘tengan paciencia y esperen’. ¿Y mientras tanto? No nos ayudan en nada. No nos han dado nada”.
“Nos están discriminando”
Lorena Capel expresó que “sentimos que nos están discriminando. Le dije al Municipio que voy a abrir el salón. Si no lo autorizan ellos, los talleres que hago los voy a empezar a promocionar y voy a abrir, y que no me vengan a clausurar”.
En ese sentido, señaló que “abrieron un montón de cosas y me parece perfecto porque la ciudad está bien, no volvimos a una fase anterior. El DNU nuevo del Presidente acá no se acató, por lo que entendí el Intendente le pidió a toda la comunidad que se cuide pero no es que se terminaron todas las reuniones”.
Enojada, sostuvo que se enteró de muchos lugares que presentaron los protocolos después que los salones de fiesta y ya los habilitaron. “Hay un tema con los peloteros. No sé qué pasa, hay falta de voluntad. Entonces nosotros, como el Intendente rebelde, bueno, los peloteres rebeldes abriremos, que nos vengan a clausurar a todos porque necesitamos laburar, necesitamos vivir, ya no da para más esto. No nos pueden dar ayuda de ningún tipo, que nos dejen trabajar”, advirtió.
En cuanto a la situación del sector, presagió que “como va la cosa, van a sobrevivir los que son dueños de los locales y el resto vamos a ir cerrando de a poco si no nos dan ninguna respuesta cercana”.
Desde su óptica, el grupo “se apagó”, desilusionado por la falta de respuestas y la desesperanza. “Somos los mismos que salimos en todos lados porque creo firmemente que nos tienen que ayudar. No nos pueden dejar así tirados como nos están dejando”, concluyó.
Fuente: El Eco de Tandil